La mesoterapia es una técnica médica alternativa
Consiste en inyecciones selectivas de medicamentos en la capa profunda de la piel (la dermis).
La mesoterapia es una técnica médica inventada en Francia a principios de los años 50 por el médico generalista Michel Pistor.
La mesoterapia consiste en inyectar pequeñas dosis de medicamento bajo la dermis (la capa más interna de la piel). El principio es utilizar cantidades más pequeñas de fármacos dirigiéndolos directamente a la zona a tratar o lo más cerca posible de ella.
Inicialmente pensada para tratar el dolor localizado y la insuficiencia venosa, esta técnica se utiliza ahora para tratar muchas patologías diferentes. Algunos ejemplos son:
- Reumatismo
- Oosteoartritis
- Dolor lumbar o cervical
- Tendinitis
- Esguinces
- Tinnitus
- Herpes
- Infecciones ORL
- Caída del cabello (alopecia)
La mesoterapia se enseña en las facultades de medicina, a los médicos licenciados o a los estudiantes del 3er ciclo de los estudios de medicina. Existe un diploma interuniversitario de mesoterapia y sólo los titulares pueden mencionar esta técnica en su placa.
El seguro de enfermedad reconoce la mesoterapia como práctica terapéutica «complementaria» y, en determinados casos, los procedimientos realizados por un médico generalista pueden ser parcialmente reembolsados.
En cambio, no se reembolsan los procedimientos de mesoterapia en el marco de la medicina estética.
¿Cuáles son los beneficios de la mesoterapia?
Es difícil llegar a una conclusión sobre los beneficios reales de esta técnica, ya que existen pocos estudios científicos que demuestren su eficacia.
Sin embargo, se sigue utilizando regularmente para el tratamiento del dolor, sobre todo en reumatología, medicina deportiva y también en medicina estética.
Mesoterapia y celulitis
La mesoterapia suscita cada vez más interés en la medicina estética, donde se presenta como una alternativa a la cirugía. Se utiliza principalmente en tratamientos contra la celulitis o para fundir la grasa de muslos, glúteos, caderas, piernas, brazos e incluso de la cara, alrededor de los ojos.
La celulitis es una acumulación de grasa bajo la piel, que le da un aspecto de «piel de naranja«. Por ello, la técnica adoptada por los mesoterapeutas consiste en inyectar sustancias para fundir la grasa de las zonas afectadas. Se pueden inyectar muchas sustancias, por ejemplo: enzimas de colagenasa, cafeína o incluso extractos de alcachofa
¿Cómo se desarrolla una sesión de mesoterapia?
Durante una sesión de mesoterapia, el médico aplica varias inyecciones superficiales de medicamento directamente en las zonas a tratar o alrededor de ellas. Las inyecciones se realizan con una aguja fina de 4 a 13 mm de longitud. Pueden hacerse manualmente o con una pistola de inyección electrónica. Dependiendo de la enfermedad a tratar y de la estrategia adoptada por el médico, el número de inyecciones necesarias puede variar y, en ocasiones, puede llegar a varios centenares.
El número de sesiones también puede variar en función de la enfermedad. En casos agudos, como lesiones deportivas, de 1 a 3 sesiones pueden ser suficientes.
En cambio, para afecciones crónicas como el reumatismo o la artrosis, pueden ser necesarias de 10 a 15 sesiones a lo largo de 6 meses o un año completo.
Peligros y contraindicaciones de la mesoterapia
Los defensores de la mesoterapia afirman que los efectos secundarios son extremadamente raros o limitados si las inyecciones las realiza un profesional.
Sin embargo, existen pocas publicaciones científicas que evalúen la eficacia o los riesgos de la mesoterapia. Las infecciones cutáneas son el riesgo más comúnmente comunicado, pero no hay que descuidar la aparición de hematomas, las reacciones alérgicas localizadas en el punto de inyección y la toxicidad del producto.
Las soluciones inyectadas contienen a menudo productos utilizados en medicina convencional pero cuya comercialización no está autorizada. Es el propio facultativo quien elige y mezcla las sustancias antes de las inyecciones.