Conoce las virtudes del masaje
La mayoría de las personas conocen algunos de los beneficios del masaje. Así como la sensación de relajación, ligereza y bienestar que nos aporta. Después de un masaje, nos sentimos menos tensos, menos estresados y definitivamente más «zen». También sabemos que algunos de los puntos de tensión y fatiga muscular desaparecen.
¿Pero por qué? ¿Sabías que el masaje tiene un efecto importante en la circulación sanguínea? ¿Qué afecta al sistema linfático y al sistema nervioso autónomo? A continuación, te explicamos lo que necesitas saber sobre los masajes:
Los beneficios del masaje en el sistema cardiovascular
El sistema cardiovascular es un mecanismo de transporte de sangre esencial para el organismo. Los vasos sanguíneos (arterias, venas y capilares) forman una compleja red de varios kilómetros.
Su función es transportar oxígeno y nutrientes a las células y arrastrar los productos de desecho metabólicos y las toxinas para su eliminación. Por lo tanto, el masaje estimula la vasodilatación de los vasos sanguíneos superficiales y produce lo que se denomina hipertermia local: un calentamiento de la piel.
El ligero enrojecimiento asociado a este calentamiento de la piel indica un aumento del flujo sanguíneo. Este flujo aumenta el transporte de oxígeno y nutrientes y acelera la eliminación de toxinas. Todo ello permite que la piel, los tejidos y los músculos estén flexibles y sanos.
Los beneficios del masaje en el sistema linfático e inmunológico
El sistema linfático es una red de vasos y órganos por los que circula la linfa. La función de este fluido es facilitar las respuestas inmunitarias.
El sistema inmunitario filtra la linfa para interceptar todos los agentes patógenos, células anormales y partículas extrañas. A continuación, se pone en marcha los mecanismos de defensa inmunitaria para eliminar estos indeseables del organismo a través del torrente sanguíneo.
El masaje tiene el efecto de estimular la circulación de la linfa, ayudando así a combatir enfermedades y a hacer el cuerpo más fuerte y resistente.
Los beneficios del masaje en el sistema nervioso autónomo
El sistema nervioso autónomo controla las funciones corporales involuntarias, como los latidos del corazón y la digestión. Consta de dos subsistemas: simpático y parasimpático:
- El sistema nervioso simpático se activa en caso de emergencia o traumatismo. Nuestro cuerpo se prepara entonces para «luchar o huir». Esto provoca un aumento de la respiración y del ritmo cardíaco, una contracción muscular, una ralentización del sistema digestivo y la secreción de adrenalina. Cuando el estrés desaparece, el cuerpo pasa al sistema nervioso parasimpático: el ritmo cardíaco desciende, la respiración se ralentiza, los músculos se relajan y la digestión vuelve a su ciclo normal.
- El sistema nervioso parasimpático el masaje activa el sistema nervioso parasimpático y reduce la secreción de cortisol, la hormona asociada al estrés. A medida que te relajas, la respiración y la circulación sanguínea se ralentizan, el estrés se reduce y el estómago empieza a rugir: tu cuerpo se encuentra en un estado de completo descanso. Se produce una relajación general.
El masaje ayuda a reducir el estrés, la ansiedad y los efectos de la depresión. Nuestros pensamientos son más claros y nuestras emociones más tranquilas. Dormir es más fácil después de un masaje. Además, el cerebro segrega endorfinas. Se trata de hormonas que, además de tener un efecto analgésico, producen una especie de éxtasis y euforia que conduce a un estado general de bienestar.
Los beneficios del masaje en el sistema muscular
Los músculos pueden hacer dos cosas: contraerse o relajarse.
Un músculo sano vuelve a su forma normal después de una contracción, mientras que un músculo disfuncional permanece anormalmente tenso. Si un músculo es disfuncional, puede ser porque está cansado por demasiado trabajo, entrenamiento o estrés. También puede haberse lesionado por calambres, hematomas, estiramientos o movimientos repetitivos. Las consecuencias: reducción de la movilidad y de la circulación sanguínea. Es en estos músculos disfuncionales donde pueden desarrollarse los «puntos gatillo».
¿Qué es un punto gatillo?
Un punto gatillo aparece como un nódulo o un cordón de fascia endurecida (la fascia es la envoltura de las fibras musculares). Cuando se localiza en la superficie, normalmente se puede palpar y sentir dolorosamente. Tiene fibras musculares que se contraen constantemente.
Debido a la mala circulación sanguínea, esta contracción impide un buen suministro de oxígeno y contribuye a la acumulación de productos de desecho metabólicos. Este músculo disfuncional tendrá un impacto inmediato en los tendones, articulaciones, músculos y tejidos circundantes.
Un desequilibrio en la movilidad provoca la aparición de diversos síntomas: dolor, tensión, rigidez, debilidad muscular, insomnio, dolores de cabeza, tendinitis, entumecimiento, etc.
La terapia de masaje alivia estos puntos de tensión. Como los puntos gatillo se localizan en los músculos, se aplica una presión estática firme, normalmente con el codo.
A continuación, se realizan masajes profundos, movilizaciones y estiramientos. Esta presión puede ser incómoda, pero la sensación de bienestar y relajación no tarda en llegar. Un nuevo flujo de sangre aporta oxígeno y nutrientes, al tiempo que facilita la evacuación de las toxinas que se habían acumulado. El músculo vuelve a ser flexible.
Masaje: beneficios para el cuerpo y la mente
Ahora ya conoce mejor los mecanismos del cuerpo y los numerosos beneficios de la terapia de masaje. Recuerda que cuidar tu cuerpo te aporta bienestar tanto a nivel físico como psicológico. Dedica el tiempo necesario para parar, volver a centrarte y dejarte llevar. Además de todos los efectos fisiológicos, el masaje también ayuda a hacer circular la energía vital por todo el cuerpo.
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